Miscelánea Nº 2, Azuqueca 2009.
Hace años estando formándome en la Escuela Julián Besteiro, nos dieron unas directrices y sus convenientes explicaciones sobre la imagen corporativa, cosa que si bien nos parecía algo extraña según profundizábamos en “los porques” fuimos entendiendo.
Nos decían que intentáramos explicarnos el por que teniendo UGT una imagen mundialmente conocida y con una carga similar a la de coca cola, en cuanto a valor de imagen, con el dibujito que todos ya habéis visualizado, muchos compañeros se empeñaban en modificar dicha imagen de UGT con sus manos entrelazadas y sus iniciales claramente definidas.
Entre varios ejemplos nos presentaron la de un gran pueblo castellano, que junto a una pequeña imagen corporativa destacaba un dibujo de una cigüeña, el motivo dicho pueblo en su escudo tenia uno de estos animales, también nos colocaron el ejemplo de la F.S.P de Guadalajara que su imagen se colocaba unas barritas de colores azules y una pequeña galleta de UGT al margen.
Pues bien ya entonces llegamos a la conclusión de que esa necesidad de identificación propia mas valorada que la imagen global de UGT reconocida mundialmente, era debida a la falta la sensación de pertenencia a algo que nos supera a algo que esta por encima de intereses particulares o locales, es decir de ser un todo agrupado en una imagen corporativa y el deseo de identificarse por si mismo.
La conclusión fue que se debería unificar esa imagen a nivel nacional, pasados los años ahora contamos con la misma imagen en toda España se acabaron los personalismos, pertenecemos a una maquinaria y somos parte de ella, ahora por poner un ejemplo en los tablones de anuncios de los trabajadores de todo la geografía nacional nuestra imagen es idéntica, se acabaron los dibujitos diferenciadores.
Toda esta parrafada viene a cuento de algo que observe en el hospital Universitario de Guadalajara hace unos días, una tontería que me ha dado que pensar un poquito.
Veréis se trata de lo siguiente, vi un cartel de una asociación sobre la leche materna sus propiedades y una campaña de “tetadas” creo recordar por parte de la zona de influencia, entre los patrocinadores, se veían escudos de ayuntamientos, asociaciones, caja Guadalajara creo recordar y uno que me resulto extraño y como fuera de lugar, me acerqué a contemplarlo y ¡sorpresa! Leche, era de Azuqueca sí nuestra nueva imagen corporativa… un circulito rojo con unas rayitas en la que aparece una letra a y dos rayitas paralelas que parecen un igual, debajo en letra casi invisible aparecía la concejalía que lo promovía.
Lo primero que pensé es que necesidad tiene Azuqueca de tener un emblema corporativo diferenciador, ese ya existe y es nuestro escudo, que casi seguro que es reconocido en toda la provincia y parte del extranjero, después empecé a asociar las normas aprendidas y los porques explicados durante mi formación como sindicalista y empecé a analizar la situación.
Primero de ¿donde nace esta iniciativa? ¿Cuánto a costado y quien la ha realizado, algún apadrinado quizás? ¿Quien la a promovido?, ¿que necesidad real o imaginaria a llevado a su concreción? ¿Por qué en una entrada a nuestro pueblo en lugar del escudo de Azuqueca, eterno e inamovible aparece una estupidez nueva? Que nadie reconoce como Azuqueca y que esta expuesta a que pasado mañana otro partido la vuelva a retocar o modificar totalmente al igual que se ha hecho con la anterior imagen corporativa, invalida ya por desaparecida.
Quizás es debido a que quienes nos representan en el ayuntamiento se quieren diferenciar ¿de que? Que necesidad real tenía Azuqueca de ese dibujito insustancial. Quien es su responsable, quien su ejecutor, cuanto a costado y quien la ha creado y a santo de que ¿Es que no se sienten parte de algo que esta por encima de políticas imágenes y mentalidades como es el pueblo mismo de Azuqueca?
Personalmente tengo mis conclusiones dejemos a vuestra imaginación y sin profundizar mas en este despropósito, por mi parte, a las vuestras, pero no me gusta.
Volviendo con el tema de la imagen, recordáis que Azuqueca de Henares tuvo su propia bandera, si que la gozó, lo que ocurre es que nació para bien y alguien se encargo de “disiparla con el tiempo” no debía estar en sintonía con los nuevos tiempos que se avecinaban, ¿Qué como era? Blanca y limpia, con una paloma iniciando el vuelo entre alambres de espino, lo dicho no esta en sintonía con nuestros tiempos, donde con una apariencia de democracia y libertades, al que levanta la voz lo menos que le dicen es hijo de puta sindicalista de mierda, que va contando cosas por ahí a la prensa…(es bueno tener amigos por todos los sitios y a veces jodido) en algunos casos que en otros te amargan la vida durante años, y tienes que ser muy duro o constante para que ciertas personas entiendan según que cosas y todo se ande mas o menos regular.
Bueno cambiemos de tercio que esto es de todo un poco.
Quiero preguntaros una cosa, a saber:
Si un chaval coge un cartel de fiestas de un pueblo perdido, lo modifica, lo retoca, lo presenta a un concurso de carteles y gana, y después cuando se sabe que es un plagio, se le escarnece y obliga a devolver el premio del concurso y se le pone a parir.
Y si un año mas tarde no se hace concurso, si no que se le encarga a un “incipiente artista” que coge una foto ganadora de un concurso y la modifica y la retoca, ojo con un programa informático al alcance del mas tonto del pueblo no se vallan a creer, y encima le pagan por lo bien y bonito que lo ha hecho.
¿Decidme o yo me he vuelto gilipoyas o es lo mismo? Joder que país y “no pasa na aquí tol mundo contento” ni tradición, ni décadas de hacerlo por concurso, ni dios que lo crió, a tomar por culo.
Vamos que el que tiene padrino se bautiza ¿no? Y quien asume esta responsabilidad, el concejal de cultura, sus técnicos o quien demonios, podemos pensar que esta es una manera de quitarse de encima la posibilidad de un plagio, pero hombre que al menos el “artista apadrinado” hubiera puesto algo nuevo ,innovador, y sobre todo ORIGINAL, coño ORIGINAL, y por otra parte, me auto propongo yo para el próximo año en igualdad de condiciones, es decir que me cojo la foto ganadora de un concurso la meto en el ordenata y le doy la mitad de los seiscientos eurazos a un amiguete que se maneja de cojones con el Word Art. Vamos que lo llevamos a medias y a falta de padrinos, llevaré todas las firmas que recoja del pueblo con la promesa de barra libre hasta 100 euritos en un lugar por determinar dios mediante. Sea pues, que va en serio.
O eso o que se vuelva a hacer un concurso, donde las obras tendrán que ser originales y con el compromiso firmado del autor de que de localizarse cualquier asomo de posible plagio en el cartel ganador, no solo tendrá que devolver el premio si no abonar una multa de 6.000 euros mas todos los gastos de reproducción surgidos. Esto por poner algo claro, y a ver si el “artista apadrinado” tiene redaños a presentarse y utilizar su pretendida calidad como artista para ganar en justa lid a todos los demás concursantes.
Prometo eso sí, que sí se hace como propongo, no me presentaré mas que nada por no poner en un aprieto a algún artista con padrinos…
Saludos fraternales a todos y todas y otro día más.
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