Cualquiera que hasta aquí llegase leyendo las diferentes entradas en este modesto blog, tiene ya base mas que de sobra para sacar tristes, lamentables conclusiones de lo que de verdad esta ocurriendo, lean pues la que sigue teniendo en cuenta que el alumbrado público en Madrid lleva años , repito años, privatizado y que este año tocaba modernizar el contrato... los trabajadores en vista de como iban las cosas en limpieza y jardinería, hicieron o tomaron la iniciativa de hacer algo nuevo ¡¡¡ UNA HUELGA PREVENTIVA !!!, avisando así al consistorio que no iban a permitir bajo ningún concepto ser los paganinis como siempre de las bajas temerarias de las empresas subsidiarias, subcontratadas de la subcontrata de la contrata... , Madrid renuncio en principio a volver a reprivatizar el alumbrado ¡¡¡ vivan las huelgas preventivas !!! , no hay que esperar a que las cosas pasen, como nos tienen dicho, para luego decirnos, es que ahora es tarde, como nos vienen diciendo todo es mentira …pero saquen ustedes sus propias conclusiones que yo voy empezando a darme cuenta de cosas que muchos no alcanzan ni a sospechar .
Vuelvo a dar las gracias por vuestras aportaciones e informaciones aunque algunas técnicamente van cargadas de puro veneno.
Madrid elimina 17.434 farolas
El Ayuntamiento alega un ahorro de 1,9 millones
IU denuncia el derroche energético en los barrios ricos y una mayor sensación de inseguridad en el resto.
Si cuenta usted estrellas en el cielo, no pasará de medio centenar en
una noche despejada. Y eso, en el mejor de los casos. Según la
Agrupación Astronómica de Madrid, hace años brillaban 6.950 sobre la
capital. Ahora las siete estrellas de la Osa Menor se quedan en tres
para los madrileños. La culpa es del alumbrado público. Pero pruebe a
contar farolas: están desapareciendo casi tan rápidamente como antes las
estrellas.
En el último año y medio se han retirado 17.434 unidades de las
252.000 repartidas por toda la ciudad (un 6%). El Ayuntamiento (PP)
alega que así ahorra energía. Y dinero, que falta le hace. Izquierda
Unida recibe “constantes quejas de vecinos sobre la falta de farolas en
las calles”, y denuncia que la poda los últimos meses “no evitará el
despilfarro energético en las zonas privilegiadas” de la ciudad, donde
la contaminación lumínica sigue siendo muy elevada, y sí ahondará la
sensación de inseguridad de los madrileños de otros distritos donde no
sobran farolas, pero las están quitando.
Y respecto a las estrellas, olvídese de que la progresiva
deforestación de luminarias vaya a enriquecer el cielo nocturno: el
problema no radica en el número sino en el tipo de farolas, y en eso los
esfuerzos del Ayuntamiento siguen siendo desmayados.
Cuarto de millón de farolas. La ciudad cuenta con
252.000 farolas. El contrato de alumbrado público suscrito entre el 1 de
diciembre de 2012 y el 30 de junio de 2013 asciende a 19 millones de
euros; es decir, casi 90.000 euros al día. El Ayuntamiento calcula que
la eliminación de esas 17.434 farolas supondrá, en términos económicos,
un ahorro de 1,9 millones de euros anuales. En términos energéticos,
serán 2.600 kilovatios menos de potencia instalada. En términos
ecológicos, 4.367 toneladas de dióxido de carbono que se dejarán de
emitir a la atmósfera. En términos ciudadanos, sin embargo, serán 17.434
farolas que dejarán de alumbrar las aceras y portales para mayor
seguridad de los madrileños.
Alumbrado por duplicado. El Ayuntamiento mantiene
que “se está procediendo al desmontaje de puntos de luz en todas las
zonas que sobrepasen los niveles de iluminación máximos permitidos” por
el reglamento de eficiencia energética aprobado en 2008 por el Gobierno,
entonces socialista. “Se ha actuado principalmente en las calles que
contaban con alumbrado duplicado o con puntos de luz muy próximos entre
sí”, añade. Y pone como ejemplo la coincidencia en el distrito Centro de
farolas en las aceras con otras colgadas de un brazo anclado a la
pared. “Este tipo de instalación había sido denunciado en numerosas
ocasiones por los grupos ecologistas y de protección del cielo por
suponer un gasto excesivo de consumo eléctrico”, apostilla el edil de
Medio Ambiente y Movilidad, Diego Sanjuanbenito.
En esos casos, se están desmontando “preferentemente” los faroles
pegados a las fachadas, reubicando el resto para alcanzar “los niveles
de iluminación y uniformidad adecuados en cada calle”. Además, se están
suprimiendo puntos de luz en los soportes que tenían más de una
luminaria.
“La eliminación de esas farolas viene a confirmar el despilfarro
energético que existía en algunas de nuestras calles. Sin embargo, esta
medida no asegura que barrios con permanentes denuncias sobre la falta
de luz vayan a partir de ahora a contar con un servicio óptimo que
garantice la sensación de seguridad de sus vecinos”, replica la concejal
de Izquierda Unida Raquel López.
No hay comentarios:
Publicar un comentario