COMENTARIO DEL DIARISTA.
Víctimas laborales
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Muere un hombre al volcar una carretilla elevadora junto a un caserío en Gabiria
Accidente mortal con una fenwick. /
La víctima, de 53 años y con domicilio en Beasain, circulaba por una pista de cemento cuando se produjo el siniestro
Un hombre falleció este miércoles en Gabiria a consecuencia de las graves lesiones que sufrió tras volcar la carretilla elevadora que conducía. La víctima tenía 53 años y residía en Beasain.
El siniestro tuvo lugar, según informó el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco, a las 11.15 horas, en las inmediaciones de un caserío situado en el barrio Ugarana Goikoa de la citada localidad. Al parecer, la víctima conducía el vehículo por una pista cementada próxima a la vivienda y volcó con la mala fortuna de que la estructura metálica de la carretilla cayó sobre su cuerpo.
El trabajador quedó atrapado y los sanitarios desplazados al lugar nada pudieron hacer por reanimarle. Efectivos de los bomberos del parque foral de Ordizia fueron requeridos en el lugar el suceso a fin de que rescataran a la víctima. El cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Donostia para serle practicada la autopsia.
Fuentes consultadas indicaron que el fallecido ayudaba a un amigo suyo en unos trabajos que se acometían en el caserío cercano al lugar en el que se produjo el accidente.
Miembros de la Unidad de Tráfico de la Ertzaintza, a instancias de la autoridad judicial, se desplazaron al lugar suceso donde levantaron un atestado y tramitaron las primeras diligencias como si fuese un siniestro de tráfico. De mantenerse este criterio, el fallecimiento de este vecino de Beasain pasaría a engrosar la lista de víctimas de las carreteras guipuzcoanas. De esta forma, con su muerte se elevarían a doce los fallecidos en lo que va de año, de los que cinco eran motoristas. El más trágico de todos ocurrió el 4 de enero en Aretxabaleta, tras una colisión precisamente entre una motocicleta y un autobús. Las víctimas fueron los conductores de ambos vehículos.
Seis días después, perdió la vida un transportista rumano que resultó atropellado por el remolque de su camión, en el área de descanso de Oiartzun. Otras dos personas fallecidas fueron un vecino de Zarautz, arrollado el 18 de febrero por un conductor que dio positivo, y una mujer atropellada en la Variante donostiarra, el pasado mes de abril.
El pasado 14 de mayo murió un varón de 53 años, con domicilio en Barcelona, tras volcar el vehículo en el que viajaba en la variante de San Sebastián. La última víctima fue un motorista de 42 años, vecino de Pasaia San Pedro, que la madrugada del 27 del mes pasado falleció tras chocar contra un árbol en la avenida de Navarra.
En junio perdió la vida otro motorista, un donostiarra de 51 años y el pasado mes de agosto fallecido otro motorista de 58 años de Bergara tras colisionar con su vehículo contra una furgoneta en Aretxabaleta. A estos fallecimiento hay que sumar la de un vecino de Beizama, de 85 años, tras salirse su vehículo de la calzada, un siniestro que tuvo lugar en el mes de julio.
El último accidente mortal se produjo el pasado 17 de septiembre en el barrio de Narrondo de Zumaia. Una mujer de 77 años, vecina de Azpeitia, perdió la vida. En el suceso resultó herido de gravedad el marido de la víctima, mientras que la conductora del vehículo, de 54 años, hija del matrimonio, sufrió lesiones de menor consideración.
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