SOCIEDAD
La Guardia Civil reconoce mostrarse preocupada por el índice de suicidios entre sus agentes
El
Gobierno reconoce 52 casos en España en los últimos cinco años, al menos
uno de ellos en Navarra, a pesar del protocolo de prevención.
29 de Enero de 2017 (12:29 h.)
Efe
El Gobierno de España ha reconocido que 52 guardias civiles se han suicidado en los últimos cinco años en todo el país. Así lo ha confirmado en una respuesta parlamentaria planteada por el PSOE a la que ha tenido acceso Efe.
La respuesta ofrece datos desde 2012 y hasta el 28 de octubre de 2016,
un periodo en el que se registraron 52 muertes. Andalucía es la
comunidad con más casos, con un total de 14, por delante de los 11 de
Madrid. En Navarra se ha registrado un caso en estos últimos cinco años.
La tasa de agentes de la Guardia Civil que se quita la vida resulta más elevada que el porcentaje medio entre el resto de la sociedad.
La media en el cuerpo es de 16,49 casos por cada 100.000 personas,
mientras que la de la población en general es de 11,78; según señalan
desde a Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC).
AUGC precisa también que la tasa de suicidios en la de la Policía
Nacional, por posibles similitudes al contexto laboral de los guardias
civiles, también es menor y se sitúa en 12,28 casos por 100.000
personas. De esta manera, la Asociación Unificada de Guardias Civiles ha
compartido su preocupación por estos índices de suicidios.
Moya cifra en casi 500 el número de muertes por suicidio en la Guardia Civil, un 90% de ellos con armas de fuego reglamentarias. "Descarta" la explicación de que esas tasas más elevadas se deban sólo a causas personales y familiares o al riesgo añadido que supone trabajar con armas de fuego o ser propietario de éstas.
Lejos de ello, el secretario general de AUGC ve detrás las "diferencias laborales con otros cuerpos policiales, junto a las dificultades para defender sus derechos", además de una idiosincrasia propia de la institución "anclada en una visión de sus recursos humanos más propias del paternalismo decimonónica que de la etapa democrática en la que vivimos".
El socialista ve imprescindible intentar analizar de qué forma pueden
influir en esas tasas más altas las "condiciones y circunstancias
laborales". Según Hurtado, y a diferencia del criterio de AUGC, este análisis de evaluación "pone de manifiesto que son preponderadamente factores ajenos a la institución los presentes en estas desgraciadas situaciones".
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