LEMOSMuere acribillado por las avispas tras alcanzar un nido con la desbrozadora
La víctima, vecino de Pantón, dejó el tractor y huyó a pie, pero cayó a los pocos metros
LUGO / LA VOZ
Eduardo Martínez, un agricultor jubilado de 66 años de edad y vecino del lugar de Acedre, en la parroquia de Cima de Vila, en el municipio lucense de Ferreira de Pantón, perdió la vida el viernes por la tarde después de sufrir múltiples picaduras de avispa, posiblemente de velutina, cuando trabajaba en una finca.
La fatalidad sobrevino sobre las seis de la tarde, cuando el hombre se encontraba desbrozando con un tractor en una propiedad ubicada en la aldea de Serode, en la parroquia de San Fiz de Cangas, en Pantón. En un zarzal se hallaba un nido de avispas, que tras ser golpeado por la desbrozadora que manejaba la víctima, se deshizo, haciendo salir a un gran número de insectos
El hombre pisó el acelerador del tractor para intentar escapar de la nube de avispas, pero no consiguió que estas se alejaran
Vecinos del hombre muerto por el ataque de avispas: «Eduardo non vai ser o último, aínda morreremos máis»
Con una gran cantidad de insectos encima, bajó del tractor rápidamente, dejándolo encendido en la finca, y emprendió su huida a pie. Ya en la carretera, el trabajador se cayó y pereció sobre el asfalto.
El hombre pisó el acelerador del tractor para intentar escapar de la nube de avispas, pero no consiguió que estas se alejaran
Vecinos del hombre muerto por el ataque de avispas: «Eduardo non vai ser o último, aínda morreremos máis»
Con una gran cantidad de insectos encima, bajó del tractor rápidamente, dejándolo encendido en la finca, y emprendió su huida a pie. Ya en la carretera, el trabajador se cayó y pereció sobre el asfalto.
Tras alertar un particular del suceso, la central de emergencias movilizó a los servicios de emergencias y hasta el lugar se desplazaron agentes de la Guardia Civil, el helicóptero y los profesionales sanitarios, que solo pudieron confirmar la muerte del agricultor.
El hombre falleció a causa de las múltiples picaduras que estos insectos le causaron por diversas zonas del cuerpo. Para determinar si el veneno inoculado se debe a una avispa autóctona o a una asiática, se remitieron muestras al Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses de Madrid, dado que la toxicología actual permite discriminar a qué tipo de insecto pertenece el veneno hallado en el cuerpo del fallecido. Dichos resultados tardarán unas semanas en llegar a Lugo.
siniestro laboral
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