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viernes, 13 de junio de 2014

Exijo explicaciones. La Guardia Civil nos espio.....


Hay cosas que se me escapan, pero creo que alguien debería explicar a que se debe lo que denuncia en este caso IU, aunque yo mismo estuve presente y corríjanme si me equivoco pero para que alguien abriera las puertas del despacho desde el que se nos gravo, tenia que tener una orden de su superior.

¿por que motivos se graba a unos ciudadanos libres pacíficos y además se hace en plan espía con ventanas y cortinas de por medio ligeramente separadas para dejar entrever el objetivo de la cámara... abajo el fotógrafo oficial del ayto se hincha como es su labor ha hacer fotos , ciudadanos anónimos hacemos fotos que luego colgamos en la red orgullosos de haber estado ahí.

Se están haciendo ya listas para los paseíllos.

O se esta tomando nota para pillar a delincuentes de extrema derecha (uy perdón izquierda que los cachorrillos tienen carta blanco).

Que objetivo tienen estas grabaciones.

Quien las ordena.

Cuentan con el beneplácito de la Alcaldía  o al menos la guardia civil puede subir a los despachos de la máxima autoridad del municipio por las buenas.

Si el alcalde es la máxima autoridad  es de suponer que para que se entre en su despacho se tiene que tener permiso, y si se tienen su permiso es que se conocen los motivos  y si se conocen los motivos...

Curiosamente no había ni un solo cargo político del PSOE cuando el PSOE se ha declarado Republicano (uy perdón que eso era antes) ahora somos demócratas republicanos monárquicos.




11 de junio  de 2014
Fuente el blog de IU , de Azuqueca de Henares.(con permiso creo recordar o quizas me engañara la vista, que se hizo desde el despacho mismo del señor alcalde y ahí no entra cualquiera, lo primero por que a esas horas esta bajo llave)


co
Dejen de grabarnos, por favor
https://encrypted-tbn3.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcTjpP43-DC30AHsvlqZ7B7TemDQGLaYuhjo2INJvNTzcRNtocvU
El 3 de junio abdicó Juan Carlos I. Lo hizo sin preaviso, excepto lo que secreteara con los cortesanos que sí conocían su decisión, al contrario que el pueblo, vasallo siempre, juguete de la voluntad real, decorado y fondo del teatro del poder, que vivía ignorante.

Del mismo modo, sin preaviso, una parte del pueblo se echó a la calle ejerciendo su real voluntad, con el fin de mostrar su júbilo espontáneo por la dimisión y, de paso, para pedir democracia, que eso es un referéndum sobre la forma de Estado, más democracia, que el pueblo se gobierne a sí mismo como lo considere, con unas instituciones u otras, de una manera o al revés.


Mientras una porción de ciudadanos expresábamos nuestra alegría en la calle sin molestar a nadie en una circunstancia excepcional, súbita, sorprendente, histórica incluso, la guardia civil, cuyo sueldo pagamos con nuestros impuestos, nos grababa desde el Ayuntamiento, la casa del pueblo, como si fuésemos terroristas, delincuentes, sospechosos, enemigos, gentes de mal vivir. Suponemos que lo haría por orden del subdelegado, cargo que sale también de nuestras costillas, desempeñado por un señor del PP de probadísima lealtad hacia sus jefes, siendo el PP un partido que es ejemplo de corrupción y guarida que cobija a una muchedumbre de bandoleros sin trabuco, algunos presuntos y otros confesos, saqueadores de lo público.
La guardia civil entró en el Ayuntamiento sin pedir permiso a la autoridad competente, lo cual agrava el caso. Esa tarde se mancilló el significado de lo que es un consistorio democrático y eso no cabe en la Constitución, lo diga el subdelegado, el duque de Ahumada o el cuerpo de Alabarderos.

Seguro que si la concentración espontánea hubiera sido monárquica, deportiva o eucarística, la subdelegación o quien quiera que ordenara filmarnos se habría abstenido y mandado un refrigerio, megafonía y dispositivo médico para comodidad de los convocados.

Estamos hasta la coronilla de que quienes han de velar por nuestros derechos nos acogoten con grabaciones, multas y  montajes. Somos ciudadanos honrados, conocidos en nuestra comunidad y pacíficos. Dejen de perseguirnos, por favor, no nos empujen a donde no queremos estar, no pretendan arrinconarnos, dejen de acosar al pueblo que pena.
Estamos a la espera de que nuestro Alcalde eleve una queja pública ante tal atropello y pediremos, además, que el responsable dimita por indigno.

Y a la Benemérita le pedimos que no nos haga más vídeos promocionales. No somos fotogénicos, no queremos protagonismos indebidos, por no salir no salimos ni en los vídeos de las fiestas familiares, esas en las que siempre hay un cuñado aficionado a grabarlo todo.

Dedíquese la guardia civil a grabar las actividades que ocurren en el número 13 de la calle Génova de Madrid, por el bien de todos.

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